Actualmente, el diseño de cocinas en L se ha vuelto muy popular en viviendas donde se une el espacio del salón y comedor con la cocina.
Son diseños muy agradables de ver y sintonizan a la perfección con hogares modernos.
¿Qué es una cocina en forma de L y en qué se diferencia de una cocina en línea recta?
La cocina en forma de L es un uso inteligente del espacio.
Se disponen todos los elementos a lo largo de dos paredes formando una L. Esta configuración proporciona más espacio, lo que permite un fregadero y zona de cocinado más grandes, así como más opciones de almacenamiento.
Se trata de una distribución que aprovecha al máximo las esquinas y permite incluir una isla de almacenaje central o una mesa de comedor.
Las cocinas en L son un diseño versátil para cualquier cocina. Se pueden diseñar para adaptarse a cualquier hogar y ser tan pequeños o grandes como lo permita su espacio.
Es excelente si tiene una cantidad limitada de metros cuadrados y se adapta especialmente bien a casas estrechas.
También es perfecto para familias, ya que permite a los padres vigilar a los niños mientras cocinan, o viceversa.
5 consejos para configurar el diseño de cocinas en L perfecto
Elegir el diseño de cocina perfecto puede ser difícil.
Hay tantas opciones como el diseño de la cocina, los materiales de la encimera, los pisos y los electrodomésticos a considerar.
Si estás buscando rediseñar tu cocina, una cocina en forma de L podría ser la respuesta.
Te lo ponemos fácil con nuestra lista de 5 consejos para elegir el diseño de cocina en L perfecto:
- Si no tiene mucho espacio, este tipo de diseño es perfecto para maximizar los metros cuadrados.
- La suma de los tres lados del triangulo de trabajo debe ser de entre 4 y 8 metros.
- La distribución más habitual será:
- Frente más ancho y largo: zonas de cocción y lavado.
- Frente estrecho: zona de almacenaje.
- Aprovecha la esquina para más almacenaje con un mueble esquinero.
- Puedes inspirarte en estas ideas de diseños de cocinas en L
Ventajas de una cocina en L
- Son visualmente muy atractivas.
- Las cocinas en L son más funcionales que las cocinas lineales.
- Se adaptan perfectamente a las esquinas de cualquier estancia.
- Se integran perfectamente en el diseño de cocina abierta al salón.
- Es una opción muy recomendable en espacios rectangulares o cuadrados.
- Una cocina en forma de L proporciona dos zonas de almacenamiento separadas, una a cada lado de la isla de cocina.
- Son aptas para que cocinen cómodamente varias personas a la vez, mejora el flujo de tráfico y reduce la congestión durante las horas de mucho trabajo para cocinar.
- Se puede introducir una isla o una mesa en la parte central si disponemos de espacio suficiente.
- Nos permite realizar reformas y modificar la distribución fácilmente.
- Una cocina en forma de L puede ser una excelente manera de abrir el espacio en un espacio pequeño. Si tiene poco espacio para cocinar y preparar, una cocina en forma de L puede ser justo lo que necesita.
Desventajas de una cocina en L
- La limpieza es algo más complicada al disponer de esquinas.
- Ocupan más espacio y son más caras que otros diseños de cocinas sencillas y económicas.
- No es una buena idea tener una cocina en forma de L si tienes un espacio limitado o si cocinas o preparas grandes cantidades de comida de manera regular.
- Si el triángulo de trabajo es demasiado amplio nos resultará más incómodo trabajar.
- Tener demasiado espacio de almacenamiento puede derivar en acumular más trastos (bendito problema dirán los que no disponen de espacio).
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